En el documento que se presenta se reporta, en una Primera parte las orientaciones de su Agenda 2015, vinculadas con el Programa institucional de la PAOT para el periodo 2011-2015 y, en una Segunda parte se registran las principales actividades realizadas y los casos relevante en los que se procuró reforzar el cumplimiento de la ley y la defensa de los derechos ambientales y urbanos de los habitantes de la Ciudad de México.

Los habitantes de la Ciudad de México observamos diariamente con preocupación la pérdida de áreas verdes, afectación de barrancas, suelo de conservación, problemas de abasto y calidad de agua, tiraderos clandestinos de residuos sólidos, construcciones que sobrepasan el número de niveles permitidos, establecimientos ruidosos, entre algunos otros problemas.

Las áreas verdes urbanas (AVU) de la Ciudad de México son espacios que ofrecen una gran cantidad de servicios ambientales a todos sus habitantes, disminuyendo el deterioro ambiental y mejorando tu calidad de vida. Para conservarlas es necesario realizar varias estrategias, que van desde la planeación, ejecución y mantenimiento hasta la protección, rescate y disfrute; lo que implica la participación de todos los sectores sociales y sobre todo de cada uno de sus habitantes.

En la CDMX somos muchas personas y el área verde que nos toca por habitante es aproximadamente de 5.3m², cuando el estándar recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), para mantener la buena calidad de vida en las ciudades, es de por lo menos 9m² por habitante.

El presente trabajo tiene la finalidad de ofrecer información relacionada con la problemática socio-ambiental que actualmente está degradando las Barrancas y de la identificación de zonas de Riesgo y Vulnerabilidad Ambiental para la toma de decisiones, acompañada de información sobre dictámenes, estudios, peritajes y denuncias ciudadanas relacionadas con las Barrancas.

La Ciudad de México, como la mayoría de las grandes ciudades del mundo, se enfrenta con inercias de expansión aparentemente incontrolables aunadas a graves afectaciones al medio ambiente. Esta situación requiere de una política ambiental que, sin inhibir su crecimiento económico o la justa distribución de la riqueza, pueda crear nuevos equilibrios entre el ambiente urbano –con su dinámica interna de producción y consumo de bienes y servicios - y los variados y ricos ecosistemas que propician un ambiente sano, de tal forma que se mejore la calidad de vida de los habitantes y el futuro de la urbe sea más esperanzador. Con este enfoque se diseña y define la política ambiental del actual gobierno de la Ciudad y la denominamos como desarrollo sustentable o sustentabilidad del Distrito Federal.

El crecimiento demográfico de las grandes urbes en el último siglo presenta enormes retos a los planificadores urbanos para satisfacer la demanda de infraestructura y pueden causar serios daños en los frágiles recursos ambientales y naturales de una ciudad, por eso la planificación cuidadosa y previsión de las necesidades de la población son las claves para asegurar que una ciudad tendrá recursos naturales sanos para hoy y en el futuro. Debido a lo anterior, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial del Distrito Federal realizó una serie de estudios diagnósticos que se enfocaron a determinar las incompatibilidades de las áreas de transición rural-urbano, ubicada en suelo de conservación, caracterizar y describir el estatus de calidad ambiental-territorial de las barrancas y realizar el inventario de áreas verdes urbanas del Distrito Federal, con el objetivo de contar con información confiable de las áreas verdes del Distrito Federal, con énfasis en aquellas que corresponden a las barrancas y las áreas urbanas en suelo de conservación e identificar, delimitar y cuantificar la superficie que ocupan actualmente, tanto en suelo urbano como en suelo de conservación, para así poder instrumentar un monitoreo continuo de su evolución y asegurar su permanencia en la defensa de los derechos colectivos de los habitantes del Distrito Federal.